Bonn, 30 de marzo de 2022 - el 11 de marzo de 2022 se informó de un brote de gripe aviar en el Parque Nacional de Prespa, Grecia, que ha provocado una mortalidad masiva que ha afectado gravemente a la población de pelícanos dálmatas (Pelecanus crispus) que anidan en el Lago Menor de Prespa.

El pelícano dálmata está clasificado como «Casi amenazado» según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) y está protegido por la Convención sobre la Conservación de las Especies Migratorias de Animales Silvestres (CMS), incluido en los apéndices I y II, y el Acuerdo sobre las Aves Acuáticas Migratorias Afroeurasiáticas (AEWA). Se sabe que estas aves acuáticas migratorias anidan en colonias que se extienden a lo largo del sureste de Europa hasta Asia centro-oriental.

El Laboratorio Nacional de Referencia para la Gripe Aviar griego ha confirmado la presencia del subtipo H5N1 del virus de la gripe aviar de alta patogenicidad (GAAP) en las muestras tomadas en la población del Lago Menor de Prespa. La transmisión de la gripe aviar de alta patogenicidad puede verse influida por diversos factores medioambientales y biológicos. La cría en colonias de los pelícanos dálmatas puede facilitar la transmisión de la enfermedad, debido a la proximidad y la densidad de sus poblaciones nidificadoras. 

La página web Society for the Protection of Prespa (SPP) (Asociación para la Protección de Prespa) ha informado de que las autoridades han recogido la mayor cantidad de cadáveres hasta la fecha, que ascienden a 1143 individuos. También se ha observado que la mortalidad de los pelícanos dálmatas es masiva en las regiones húmedas adyacentes. Las tristes noticias procedentes de Grecia confirman varios informes sobre brotes similares ocurridos en los últimos meses en diferentes países, como el Reino Unido, los Países Bajos, Israel, Canadá o Senegal.

«Sin embargo, siguiendo las recomendaciones del Grupo Científico Operativo CMS-FAO sobre la Gripe Aviar (véase más abajo), las autoridades de Prespa han actuado con rapidez y han retirado eficazmente la mayoría de las aves silvestres muertas. Se trata de un avance alentador, ya que se espera que en las próximas semanas llegue al Parque un nuevo grupo de aves acuáticas migratorias, como los pelícanos blancos, lo que pone de manifiesto la importancia de adoptar medidas eficaces de contención del brote.

La gripe aviar sigue siendo una amenaza para las especies silvestres y, como demuestra el caso del Parque Nacional de Prespa, los avances en materia de conservación podrían desaparecer en un breve período de tiempo a causa del brote de la enfermedad. Por ejemplo, tras la mortandad masiva, las autoridades del Parque solamente han contabilizado 32 nidos activos de pelícano dálmata, mientras que el año pasado se informó de que había 1370 nidos en el mismo período. Por lo tanto, es muy importante la necesidad de contar con orientaciones adecuadas sobre cómo afrontar los brotes.

Como respuesta a los recientes brotes, el Grupo Científico Operativo sobre la Gripe Aviar y las Aves Silvestres ha publicado una declaración y una serie de recomendaciones dirigidas a los países en riesgo:

• El Grupo Operativo sigue insistiendo en el enfoque «La salud es para todos», que implica tener en cuenta la interconexión entre los seres humanos, los animales y el medio ambiente, en un esfuerzo por equilibrar la salud de los tres. 
• Se ha recordado a las autoridades que deben identificar y costear medidas de vigilancia y bioseguridad adecuadas que eviten que la gripe aviar se propague, especialmente en las zonas de alto riesgo. 
• Se recuerda a los organismos responsables que deben prestar atención a los consejos de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) y de la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE), así como a las obligaciones internacionales derivadas de la Convención sobre la conservación de las especies migratorias de animales silvestres (CMS), al Convenio de Ramsar y al Acuerdo sobre las Aves Acuáticas Migratorias Afroeurasiáticas (AEWA), con el fin de garantizar que no se produzcan intentos de controlar la propagación del virus mediante la eliminación selectiva de aves silvestres o la destrucción del hábitat. 
• Cuando se responda a la aparición de la gripe aviar de alta patogenicidad (GAAP) en las aves de corral, deberán respetarse las normas y directrices internacionales de la OIE. Se aconseja tomar medidas que eviten que las aves de corral infectadas transmitan el virus a las aves silvestres, así como reorganizar los sistemas de producción de aves de corral altamente susceptibles de exponerse a la gripe aviar. 
• La eliminación selectiva y preventivo de aves cautivas se ha considerado injustificada.